CONSEJO de HOY: Lactancia materna, la mejor opción.

Resulta alarmante observar como en los últimos años en muchas partes del planeta se incrementa el número de niños menores de un año a los cuales se les priva por diversas causas (la mayoría de ellas injustificadas) de las bondades de la lactancia natural o materna. Es imposible resumir en poco espacio todo el conocimiento científico acumulado que corrobora que la lactancia materna sigue siendo la mejor opción para el bebé en sus primeros meses de vida extrauterina.

Una de las causas del abandono de la lactancia materna como alimento exclusivo para el lactante, es la creencia popular de que el niño “no se llena” porque llora constantemente. Sin embargo en muchos de esos casos, cuando hacemos la evaluación nutricional en las consultas periódicas de control de niños sanos (también llamadas consultas de puericultura) se confirma que aumentan de peso adecuadamente y muestran un excelente desarrollo psicomotor, demostrando la valía de este alimento como rica fuente de energía y nutrientes necesarios para el normal crecimiento y el desarrollo integral del bebé.

Otra de las causas que inciden en el abandono de la lactancia son la reincorporación de la madre al trabajo, limitaciones de tiempo, así como la gran disponibilidad de fórmulas lácteas en el mercado, unido a la falsa creencia de que estas son más nutritivas que la propia leche materna. La introducción inadecuada de las otras fórmulas lácteas artificiales antes de los seis meses de edad puede traer serias consecuencias para la salud de su niño. Hemos visto en las consultas elevarse el número de lactantes con cuadros diarreicos secundarios a malas prácticas nutricionales.

La lactancia materna sigue siendo la mejor opción porque además de contener todos los nutrientes en la justa cantidad, proporción y composición, incluye numerosas células vivas, enzimas, proteínas y otras sustancias que controlan la flora intestinal, favorecen el crecimiento celular y poseen propiedades antiinfecciosas. El calostro, que es la leche secretada durante los primeros 3 a 8 días luego del parto, es muy rico en inmunoglobulinas, más conocidas como "anticuerpos", que le confieren al lactante una elevada protección frente a las infecciones intestinales y respiratorias. Así mismo, las células vivas presentes en la leche materna producen interferón, una sustancia con actividad antiviral. Con la situación actual donde hay una elevada incidencia de infecciones respiratorias coml la influenza, la lactancia materna es una protección para su niño que usted no debe desaprovechar.

La leche materna está fresca, siempre disponible a la temperatura adecuada, libre de contaminación bacteriana. En lo económico la lactancia materna es también la mejor opción para la familia. Para la madre, también es muy beneficiosa ya que favorece la involución y recuperación del útero después del parto y la incidencia del cáncer de seno es menor en las madres que han lactado. Como si eso fuese poco, está demostrado que los niños alimentados a pecho presentan una mejor evolución psicológica y emocional debido a la estrecha relación afectiva madre-hijo que genera. Por estas y muchas otras razones se hace necesario que la familia que hoy disfruta de la llegada de un #bebé apoye a la joven madre en su momento único de lactar, potenciando un ambiente acogedor, tranquilo y distendido. Téngalo siempre presente: lactar es amar.
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Artículo del Dr. Franklin Fernández Torres, Especialista en Pediatría, Diplomado en nutrición infantil (Cpe Fernández Torres) y colaborador de Medicina Explicada. Publicación original del Blog "Punto y Salud": https://puntoysalud.blogspot.com/…/lactancia-materna-la-mej…
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